En un inicio el mundo del internet no era atractivo para las empresas y profesionales, reducido tal vez solo a la búsqueda de información pero posteriormente se abrieron nuevas puertas como la publicidad online, la posibilidad de reclutar empleados y establecer contacto con posibles compradores.
En los últimos tiempos aparecieron las redes sociales las cuales como su nombre lo indica prometen entablar contacto con un gran número de personas, las empresas no tardaron en crear su cuenta en las principales redes sociales como Facebook o Twitter reconociendo sus beneficios como medio de publicidad o contacto comercial.
Pero últimamente regresamos al inicio, las empresas han visto a las redes sociales como una amenaza para su seguridad, considerándolas una fuente de distracción para sus empleados y no han tardado en bloquearlas para no permitir su acceso.
Temen también que intercambien información privada de la empresa lo cual beneficiaria a la competencia o incluso podría atraer ataques de hackers, fraudes o robos.
Esto se hizo muy conocido a causa de un cibernauta que coloco en su Twitter que se había ido de viaje y un ladrón no espero ni un segundo para ir a robar su casa o el empleado que escribio quejas de su empresa en Facebook y posteriormente fue despedido, sin duda el principal problema de este medio es la privacidad.
Por lo tanto las redes sociales por una parte benefician a las empresas y por otra causan ciertos perjuicios: sin duda ironías de la vida.
Interesante post, este es un tema que me fascina.
Jose