Elegir bien una carrera profesional no solo produce beneficios personales sino también evita problemas para las empresas ya que alguien que no está a gusto con su carrera terminara dejándola o cambiando constantemente de trabajo.
Al momento de escoger una carrera profesional la mayoría de jóvenes tienen una predilección por las carreras que tienen mayor empleo y posibilidad de ganar más dinero, si bien las aspiraciones pueden ser buenas los resultados muchas veces demuestran lo contrario.
Los medios de comunicación, familia y amigos promueven estudiar carreras que producen mucho dinero, empleo o que se encuentran de moda. La posibilidad de encontrar empleo es muy importante pero no es determinante para elegir la carrera en la que podamos desenvolvernos.
Es por ello que debemos analizar nuestra identidad, capacidades y características personales, solo así el estudiante podrá desplegarse satisfactoriamente en su futuro laboral. Se debe responder con mucha sinceridad:
¿Me quiero dedicar a esto toda mi vida?
¿Seré feliz realizando esto?
Lo primero que se debe hacer es elegir el campo profesional: ciencias sociales, ingenierías o salud. Luego informarnos muy bien sobre las áreas de nuestro interés a través de charlas y eventos escolares asimismo realizar un proceso de autoconocimiento para reconocer nuestras capacidades.
Lo recomendable es acercarse a un psicólogo que le pueda ayudar a definir su vocación.
Moni says
Qué dificil es elegir bien y que dificil encontrar a alguien que lo tenga claro. Yo lo tengo claro, me presentare a las escalas de oficiales del ejército para estudiar una ingeniería.
Juan Carlos says
Te felicito moni por la seguridad que reflejas y compartirnos tus proyectos profesionales.
Patricia Cabrera Zagal says
La vocación es lo que nos permite sentirnos realizados.
La solvencia económica tendremos que conquistarla ya que actualmente un título no garantiza un buen ingreso, aunque el campo ocupacional sea favorable.
Si optamos por una carrera porque cuenta con mejor campo ocupacional, no lograremos la ansiada solvencia económica porque no contamos con las características personales ni la vocación para llevarla adelante y otros que sí cuenten con ellas nos dejarán en el camino.
Si optamos porque la carrera es bonita y de nuestro gusto, pero no nos proyectamos en ella, terminaremos por no encontrarle sentido realizarla por toda la vida, nos dejará la sensación de querer hacer algo más, no solo eso.
Si optamos por una carrera porque contamos con las habilidades para desarrollarla lograremos seguramente solvencia económica pero se transformará en un aburrimiento porque no nos satisface, quedando en nosotros siempre la sensación de poder hacer algo más importante.
Si elegimos por vocación nos sentiremos realizados por el sólo hecho de realizar esa labor , y tendremos la posibilidad de conquistar el campo ocupacional por que contamos con la habilidad, la energía y la personalidad adecuada a la carrera asociada a nuestra vocación.