No podemos negar que los problemas forman parte de nuestra vida cotidiana y por más que lo intentemos no podremos evitar su aparición y la posterior preocupación, pero descuide sentir preocupación no tiene nada de malo ya que es una especie de alarma que nos alerta que se aproxima algún evento importante y que requiere nuestra atención.
Sin embargo existen eventos en los cuales solo queda esperar y no es posible modificar su resultado futuro como por ejemplo la espera de resultados de un examen o conocer si renovaran nuestro contrato de trabajo a fin de año.
En situaciones similares es aconsejable seguir una serie de consejos:
¡Siga sonriendo!
El mero acto físico de sonreír nos ayuda a sentirnos mejor. Conceda a esto la máxima atención: sonría a todas las personas con las que se encuentre: rompa “esquemas”, cada paso que de cuando ande, de lo con impulso e incorporando la energía de su cuerpo, aunque no sienta esta disposición de verdad dentro de usted, actué como si lo sintiera.
Así conseguirá tener mejor aspecto y también sentirse mejor, y la diferencia entre su actitud y la de la gente que le rodea será pasmosa.
Citas
Seleccione sus frases favoritas sobre la motivación que aparecen en libros o en otras fuentes y anótelas. Todos los grandes personajes lo hacen, desde los vendedores más destacados hasta las grandes figuras de la empresa y del mundo del espectáculo. Archívelas, guardándolas en algún lugar practico que esta “al alcance de la mano”, y utilícelas como referencia a menudo. Le cambiaran el humor y su concepción mental más rápidamente que cualquier píldora.
Cuente chistes
A la gente le encanta reírse, entonces ¿Por qué no va a ser usted un catalizador de la risa?. Aprenda un chiste o haga un comentario jocoso si los chistes no son su fuerte (¿o es que este es un asunto que afecta a su zona de comodidad?).
Conviértase en este tipo de persona que lleva la sonrisa a las vidas de los demás.
Disfrute de la vida
Reserve tiempo para observar las cosas que le rodean, aspire el aroma del perfume o la colonia de su cónyuge, acepte el cumplido de su colega. No esté tan obsesivamente empeñado en llegar a su destino que se olvide de disfrutar el paisaje que va encontrando en su camino. Las pequeñas cosas del día a día no son tan solo las piezas que configuran el edificio de la vida: ¡Son la propia vida! Y como John Lennon comento en una ocasión: “la vida es lo que nos sucede mientras hacemos otros planes”.
Concéntrese en el resultado final
No se desanime mientras recorre el camino. Ponga su mirada en el logro de conseguir acabar totalmente su tarea. Así es como los corredores de fondo, los grandes montañeros y los exploradores polares se motivan, concentrándose en la sensación de relajación, éxito y alegría que tendrán cuando lleguen a la meta propuesta. Esa es precisamente la técnica que utilizo el explorador del polo, profesor Robert Swan: ¡Algo que no era fácil hacer a 70 grados bajo cero y tirando de más de 180 kg!
Celebre sus éxitos
Todos hemos hecho algo de lo que nos sentimos orgullosos, y no es preciso que sea una gran cosa. Piense en todos sus logros, tanto en los grandes como en los pequeños. No tienen que ser necesariamente de tipo universitario, y no se menosprecie si usted no ha estado en la universidad: cada uno de nosotros tiene destrezas y capacidades que le son exclusivas.
Felicítese por su complejidad: nuestros cuerpos son unas estructuras milagrosas que incluso los mejores médicos y científicos tan solo están empezando a comprender ahora, y el cerebro de todos y cada uno de nosotros es muchísimo más complicado que el mayor y mejor ordenador que podamos fabricar. ¡Tenemos muchas cosas por las que sentirnos orgullosos incluso antes de dar un solo paso!
Evite los sentimientos que le bajan la moral
¿Qué cosas son las que realmente nos deprimen y ponen en marcha las series de pensamientos negativos que tienden a hundirnos cada vez más? La mayoría son pensamientos y sensaciones del tipo de:
No sentirse apreciado
Sentir que no se nos escucha
Concluir que la vida es injusta
Sentir que no nos aman
Tener celos
Sentirnos humillados
Sentirnos ignorados
Sentirnos oprimidos
Sentirnos traicionados
Sentir envidia
Sentirnos preocupados
Sentirnos cansados
Todos nosotros hemos tenido estos sentimientos en un grado u otro, en un momento determinado u otro. ¡No es extraño que nos sintamos estresados cuando el cambio incide durante sobre nosotros! Puede generar una caída en espiral provocada por emociones negativas, que hay que cortar de raíz.
Es importante reconocer la emoción y lo que representa y actuar en consecuencia: lo ideal es sustituirla por un sentimiento positivo generado mediante alguna de las técnicas subrayadas anteriormente. Tenemos la capacidad de desarrollar el contrapeso que equilibre esta situación y de crear sentimientos positivos tanto para nosotros como para los demás. Todo lo que necesitamos es utilizar las técnicas para “sintonizar” con una serie de pensamientos más positivos que nos ayuden a sentirnos:
Apreciados y elogiados
Bien con respecto a nuestros logros
Bien con respecto a nosotros mismos
Motivados e inspirados
Reconocidos por nuestros esfuerzos
Sanos, felices y triunfadores
Cariñosos y bondadosos
Orgullosos de nosotros y de los demás
Tomado de “Los secretos del éxito personal” de John Timperley
Afirmaciones Positivas says
La verdad es que cuando miramos desde otra óptica las preocupaciones y los problemas, éstos empiezan a difuminarse. Claro está cuanto menos nos preocupemos, mas facilmente será que evitemos o aliviemos aquello en lo que nos estamos preocupando por que le damos menos retroalimentación o feedback