Stelzer en su artículo “La inteligencia emocional en el mundo laboral” manifiesta que aumentar el capital emocional de la empresa significa conseguir lo siguiente:
• Una mejora en la comunicación.
• El trabajador se siente más persona, más pleno y con mayor calidad de vida.
• Aumenta la motivación, la claridad de la misión.
• El trabajador se compromete más con los objetivos de la empresa.
• Se mejora el clima laboral y se optimiza el desempeño personal.
• Aumenta la satisfacción personal y la productividad
• Las relaciones personales mejoran y se incrementa la autoestima.
• Las personas se implican más en su trabajo, son más responsables y autónomas.
• Mejora el clima laboral
• Aumenta la eficacia y la eficiencia de las personas y de los equipos.
• Los procesos de cambio y de mejora continua se agilizan.
• Mejoran las relaciones con los clientes y una mayor actitud de servicio.
• Mejora la rentabilidad de la empresa.
• Disminuye el ausentismo y la rotación de personal, porque la gente siente que es tomada en cuenta.
• Hay una mayor adaptabilidad a los procesos de cambio, porque se sabe manejar el miedo y la incertidumbre.
• Se puede solucionar conflictos con mayor facilidad y hasta prevenirlos.
Las emociones bien direccionadas en la empresa es sin lugar a dudas una energía positiva que debe ser tomada en cuenta en el medio. A esta dirección inteligente de las emociones.
Pedro Hernandez says
Interesantes los articulos, condensados pero con mucha pildora nutritivas.
Felicitaciones ea esta pagina
Pedro