- Revise la apariencia de su local, priorizando la limpieza y la comodidad (iluminación, ventilación, espacio, etc.) del mismo.
- Reciba con amabilidad a sus clientes, si es posible tenga un contacto directo como dueño o administrador, utilizando siempre la cortesía.
- Ayude al cliente a encontrar lo que está buscando y recomiendele un producto en específico acorde a sus necesidades, sin caer en la molestia y la incomodidad.
- Ofrezca asiento al cliente mientras espera, bríndele variedad de elementos distractores como; revistas, música, videos, etc.
- Converse con el cliente acerca del producto, para saber de sus tendencias y necesidades.
- Invite a los clientes a hacer sus propios diseños o proponer sus ideas, para luego fabricarlos como él desea.
- Cumpla con las fechas determinadas de entrega de su mercancía, esto resaltará la formalidad de su empresa.
- Al momento de pagar por el producto o servicio, pregunte a la clientela si estuvo satisfecha con el mismo e invítelos a regresar de nuevo.
- Coloque dentro del establecimiento un buzón de sugerencias, para así conocer las debilidades, fortalezas y algunas sugerencias por parte del cliente.
- Si el servicio que brinda es bueno, piense en ampliar sucursales.
Poner en práctica estos recursos no cuesta mucho, por el contrario pueden fortalecer su clientela y traerle beneficios importantes a su empresa.
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